2020 UN AÑO PARA APRENDER U OLVIDAR?

ABUELA A LA ÚLTIMA EN CANTABRIA DMODA: 2020 UN AÑO PARA APRENDER  U OLVIDAR?

Repaso de  los últimos doce meses en los que hemos vivido  momentos muy difíciles de los que hemos aprendido muchas cosas.

La Navidad está a la vuelta de la esquina  y en éste año tan complicado y duro, durísimo para todos, en mi hogar las fiestas van a ser muy especiales. Seremos menos en torno a la mesa pero con el mismo sentimiento de familia y celebración de siempre; no, mucho más.

Porque este año que está a punto de acabar nos ha hecho sufrir demasiado y debería dejarnos algunas lecciones de vida. Así he vivido yo estos últimos doce meses. Seguro que en mucho os sentiréis reflejados.

ENERO

Cumpleaños

Llegó con la alegría propia de un Año Nuevo, ilusionante y lleno de proyectos…y a mi me permitió cumplir  un  año más junto a mi  hija ( cumplimos años el mismo día ) y volver a celebrar el milagro de la vida junto a los míos.

Las noticias sobre un extraño virus nos llegaban desde China y las imágenes en los noticiarios nos parecían sacadas de una película de ciencia ficción.

 

abuiela a la ultima con su marido y su hija soplando las velas de su cumpleaños
Cada 15 de Enero, mi hija y yo , celebramos nuestro cumpleaños.

FEBRERO

Cantabria DModa

Continuó con noticias inquietantes que se acercaban a nosotros peligrosamente….y a mi me regaló un maravilloso comienzo en el equipo de Cantabria DModa para asomarme a ésta ventana virtual y contaros mi particular visión de la vida y  la moda, desde el punto de vista de una abuela poco convencional. Las circunstancias  hicieron que dejase a un lado la moda para centrarme en todo lo que estábamos viviendo.

abuela a la ultima posando con sombrero
Mi primer post en Cantabria DModa, Febrero del 2020.

MARZO

Confinamiento

Las noticias se volvieron inquietantes, duras; el tan temido e inesperado Covid-19 ( coronavirus) había llegado hasta aquí para poner nuestras vidas del revés y sembrar dolor y muerte a su paso. Y llegó el estado de alarma, y con él, el confinamiento en nuestros hogares.

La gimnasia en el salón, los bizcochos más esponjosos y las coreografías más divertidas fueron algunos de nuestros entretenimientos mientras fuera se luchaba sin descanso para contener los estragos que el virus estaba dejando a su paso. Casi todos creíamos que pasaría pronto, pero no. Resistiré fue la canción más  cantada, se convirtió casi en un himno. 

Las videollamadas a mis nietos, familia y amigos pasaron a ser el momento más grato del día, junto a la hora del aperitivo, todos los días a las 13:30 el abuelo y yo brindábamos por que se acabara ésta pesadilla y a las 20:oo salíamos a las ventanas a aplaudir, honrar, agradecer…

manos aplaudiendo por la ventana
Cada tarde a las 20:00 salíamos a las ventanas a aplaudir, honrar, agradecer…

 

ABRÍL

Solidaridad

Siguió con la mayoría de nosotros en casa, hospitales llenos y mucha solidaridad. Cientos de personas cosieron y prepararon material para nuestros sanitarios. Iniciativas de personas anónimas y otras no tanto para visibilizar, donar, ayudar…

Seguimos cada tarde saliendo a nuestras ventanas a agradecer el enorme y maravilloso trabajo que realizaban( y siguen realizando a día de hoy) nuestros sanitarios en primera línea,  seguidos del Ejército, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, Transporte y Logística, personal de servicios esenciales y tantos ( sería imposible nombrarles a todos)  que han dado todo y más  para que todo un país no se paralizase.

una ambulancia con las luces
Nuestro personal sanitario ha realizado, antes y ahora, un trabajo titánico.

MAYO

Abrazos

Entre fase 0, fase 1 y fase 2 acariciábamos la tan ansiada libertad que todos anhelábamos. En el mes de Mayo, por fin, pude abrazar a mis pequeños luceros y cuidarles otra vez mientras sus papás se incorporaban a sus trabajos al 100%.

Comenzamos a salir y a disfrutar con sentido común.

JUNIO

Abuelo 1- Cáncer 0

Mascarilla y distancia social son palabras que llegaron para quedarse. Y cancelado, prohibido, pospuesto, obligatorio, necesario...pero empezamos a salir, a retomar,  a continuar…

El abuelo volvió a viajar con un buen diagnóstico en la maleta: abuelo 1- cáncer 0.

Con el abuelo en el 2019

JULIO

Sueños y planes

Nosotros cancelamos  todos nuestros planes, nuestras salidas, nuestras vacaciones; pero no cancelamos las tardes de lectura, los baños en el mar, las puestas de sol, el cumpleaños de mis nietos, una buena conversación con amigos; no cancelamos los sueños ni las esperanzas, las risas, la música ni bailar en la cocina porque no todo está cancelado. Aún quedan muchas cosas con las que disfrutar. Seguimos manteniendo intactas las precauciones u las ilusiones, también.

Disfrutando del mar

AGOSTO

Nostalgia

De cohetes y cabezudos, de pasacalles y procesión, de conciertos y carruseles, de cenas con amigos y chatos en las ferias de La Patrona. Pero el sentido común manda y no debemos olvidar que en los hospitales no cesa la lucha, nunca se han rendido, ni en los peores momentos.

Con amigos en las fiestas de la Patrona del 2019.

SEPTIEMBRE

Orgullo

Comienzo de un nuevo curso escolar interrumpido antes de Primavera, nuestros  niños y jóvenes retoman sus clases y nos dan ejemplo con su actitud, mascarilla desde la mañana temprano hasta que salen del cole , gel hidroalcohólico  continuamente y mucha disciplina al entrar y salir de las aulas para  evitar contagios.

Mis nietos con sus mascarillas, Valentina y Nicolás se han adaptado fenomenal a ellas, como todos los niños, nos dan ejemplo.

OCTUBRE

Esperanza

Las cifras de contagios empeoran, la movilidad entre provincias se ve alterada. Un paso atrás. Algo estamos haciendo mal. Es responsabilidad de todos seguir las indicaciones de las autoridades, acatar las normas por duras que nos parezcan. Por nosotros, por los nuestros, por todos los demás…la palabra VACUNA ya está entre nosotros  y ESPERANZA también.

 

 

 

 

 

 

 

NOVIEMBRE

En petit comite 

El abuelo ha cumplido años, y lo hemos celebrado en casa, en “modo reducido”, la movilidad ha mermado considerablemente, así que nos hemos instalado en la rutina. El abuelo ha perdido un tío por Covid, maldito virus.

DICIEMBRE

Una Navidad diferente

Comenzamos recibiendo un buen diagnóstico otra vez, del abuelo. Todo O.K. Y preparando la casa para las fiestas, mis nietos esperaban entusiasmados el momento de adornar el árbol, las ventanas e inaugurar las tardes de turrón de chocolate. Qué más puedo pedir a la vida que poder verles disfrutar sanos y felices? tengo mil y un motivos para celebrar la vida aunque ésta se empeñe a veces en ponernos la zancadilla. Si algo he aprendido éste año es a valorar cada momento, cada buena noticia, cada logro por pequeño que sea…a conformarme con lo que tengo y no soñar con utopías. Por eso y mucho más, yo celebro la Navidad  más que siempre, como nunca.

Con el abuelo y mis nietos en Navidad

 

 

MIS MELLIZOS SE HAN HECHO MAYORES

Cuando nacieron mis nietos fue como un Tsunami. Pero,  en realidad, mi vida ya estaba revolucionada  mucho antes. Cuando tuve que  resetearme y volver a empezar. Cuando me dijeron que ya no más de aquello que venía haciendo hasta entonces. Por salud. Cuando de un trabajo a jornada completa pasé a frenar en seco. O casi. Porque, como si de un regalo se tratase , hace  trece  años llegaron hasta mi un par de hermanos mellizos que me rescataron de las tinieblas, me convirtieron en su TATA, me devolvieron la confianza en mi misma y me regalaron cada tarde su ternura y sus sonrisas.

A cambio, yo les di  mis cuidados y mi recién estrenada vida sin prisas que se me hizo nada al cambio. Yo salí ganando. Seguro.

Pero como no pude detener el  tiempo, mis pequeños crecieron y crecieron, dejando de necesitar mis cuidados para solo necesitar mis besos más de tarde en tarde. Mientras todo eso ocurría llegó el anuncio de que iba a ser ABUELA . Y de dos a la vez. Otra vez pares, otra vez  amor multiplicado .

Y entonces si que llegó la locura para siempre.

El primer año fue una auténtica revolución. Agotador, a veces caótico. Pero tan, tan bonito que aún hoy echo de menos tener un bebé entre mis brazos . Su olor, su llanto, su sonrisa.

 

Mientras crecían cambiaba su vida y la mía a paso de gigante, la de todos alrededor. Sus primeros pasos, su primer baño en el mar, su primera Navidad, su primer día de colegio, todos “sus primeros ” eran también los míos.

nietos de Abuela a la ultima
.Mis pequeños con 6 meses.

 

Y como otra vez el tiempo se empeña en ir demasiado deprisa, Ell@s también  crecieron  y ya no me necesitan tanto como antes…y la abuela tiene más tiempo para Ella. Sabré gestionarlo? como será mi vida ahora que no necesito moverme a golpe de reloj? demasiado tranquila?

 

 

Desde que Ell@s  llegaron, el tiempo ha ido  mucho más deprisa, no sé en que momento dejaron de ser bebés  y fueron simplemente niños.

Álvaro y Jaime con 17 años.

  A Jaime y Álvaro, por ser luz cuando solo veía oscuridad.

A Valentina y Nicolás, por ser  luceros que iluminan mis días.

      GRACIAS.

VACACIONES EN CANTABRIA: UN VERANO ATÍPICO

abuela a la ultima en la playa de Suances con mascarilla
Maribel disfrutando de un día de sol en Suances.

Estamos viviendo nuestro verano más atípico y complicado. Seguimos saliendo a la calle con mascarilla y sensatez, que es, de momento, la mejor manera y la màs responsable. Yo tenía otros planes, pero, como muchas otras cosas, casi todos hemos tenido que cambiarlos.

El coronavirus retrasó proyectos de trabajo y, por tanto, también el periodo de vacaciones del abuelo, así que las viviremos de otra manera, sin viajes fuera de nuestra provincia pero disfrutando de lo nuestro, que no es un mal plan, no?

abuela a la ultima en el mirador de Suances comtemplando la ría.
Cantabria es hermosa en la costa y el interior.

No es un verano peor, es un verano diferente. Confieso que mis planes pasaban por escaparnos a algún destino de costa lejano con chiringuito y marisco al borde del mar, cargados con maletas repletas de vestidos frescos, calzado cómodo y bisutería de colores, pero nos hemos reseteado. Y me he dado cuenta de que todo eso lo puedo hacer aquí cerquita igualmente.

De momento, solo podemos disfrutar de algun fin de semana, lo que el trabajo permita y , quizás, casi al final del verano lleguen esos dias para nosotros solos. Mientras, transcurren los dias como antes, con la excepción de tener los ojos en el horizonte y sin perder de vista las noticias. Creo que ahora mismo nos dividimos en dos grupos, los que no renuncian a su verano soñado y los que por prudencia, o miedo tal vez, prefieren posponer sus planes hasta que toda esta situación anómala se haya estabilizado. Ningún plan es malo si se aborda con responsabilidad y cautela.

Yo me he propuesto redescubrir nuestra tierra, rincones que ni siquiera conozco y otros por los que he pasado de puntillas sin disfrutarlos apenas.

abuela a la ultima y abuelo de paseo cojidos de la mano al borde del mar
Paseando por la bahía de Santander

No por ser un verano raro debe ser peor. Me levanto cada mañana  con la misma ilusión de otros años en ésta época, con la diferencia de que este año no habrá maletas que preparar ni destinos por descubrir.

Porque no todo el verano son vacaciones ni todas las vacaciones tienen que disfrutarse obligatoriamente en verano.

Amanezco cada mañana con mil planes por hacer (que no siempre se cumplen) y la misma ilusión de siempre por arreglarme y salir a conocer, a vivir, a disfrutar…Cantabria es hermosa  la mires por donde la mires y , ahora más que nunca, nos necesita llenando sus terrazas y restaaurantes, comprando en sus comercios, visitando sus museos y lugares de entretenimiento…! redescubriendola !

Somos una comunidad pequeña, pero privilegiada en cuanto a enclave y servicios. Norte o Sur, Este u Oeste; pueblo o ciudad; mar o montaña; hotel, apartamento, casa vacacional, camping, posada rural, tu propia casa…! tú eliges!. Las opciones son muchas y muy diversas. Todo lo tenemos muy cerca, elijamos una forma de desconectar o un poco de cada una, siempre será una muy buena opción. Yo, éste verano, me quedo en Cantabria.

   “El pasado ha terminado y se ha ido. El futuro no está garantizado”.

     Wayne Dyer

 

 

 

 

 

Éste post completo podéis  leerlo en http://www.eldiariomontanes.es en la sección de Cantabria DModa.